Habia una ves un pequeño niño pastor llamado israel, que cuidaba un linda borregita llamada natalia. Un dia revisando su computadora, se dio cuenta que ¡ su borregita habia desaparecido !
entonces, decido tomar su escopeta de una mesa que estaba en el comedor e ir en busca de su pequeña borregita natalia a la que tanto queria.

Despues de mucho caminar, y buscar, llego a una cabaña donde se encontro con un buen pastor que le dijo :
- yo he visto a una borregita igual que como me la ha descrito usted niño; blanca como una tormenta de nieve, tan esponjada como un monton de algodon, tan tierna como un peluche, parecia un montoncito de lana corriendo por las praderas del viejo shuonzu.-
-¡hoo noo! ¿las praderas del viejo shuonzu? -
-si, pasé muy rapido por ahí, y, solo alcance a ver como saltaba entre toda la hierba.-
-¿seguro que era mi borreguita?-
-¡ hoo sii, seguroo, que si lo era !-
-bueno... ¡gracias! de todos modos-**
Entonces el pobre isrrael, salió en busca de la borreguita, que era la unica compañera que tenia en el mundo.
El viejo shuonzu, era una persona fría, parecía estar siempre malhumorada, por lo que todos en el pueblo le guardaban respeto y temor;así fue entonces que el pobre Isrrael, caminó y caminó otra vez con rumbo a su casa, la cuál estaba muy cerca de la casa del viejo shuonzu.
El tenia mucho miedo de entrar hasta donde estaba la pequeña cabaña del viejo, para preguntar si acaso podía ponerse a buscar por donde podría estar, dentro de los campos del viejo; en eso se armó de valor, cuando escucho que reían. Isrrael se quedo muy extrañado y puso mucha atención al ruído y asi volvió a escuchar que reían , con un gusto tan grande que le devolvió la tranquilidad y asi tuvo mas fuerzas para asomarse por una brecha.

[hershey´s] nga !! !!